texto

bal bla

martes, 11 de febrero de 2014

Curar la hipoglucemia con la implementacion de la dieta Paleolitica

La hipoglucemia es la condición corporal en la que la concentración de glucosa en sangre se encuentra en niveles demasiado bajos (menos de 70 mg/dl) o por debajo de los límites en los que acostumbramos estar y funcionar adecuadamente. Lo contrario sería la hiperglicemia que se da cuando la concentración de glucosa en sangre está muy por arriba de los límites que consideramos normales o saludables. Las dos son dañinas y peligrosas. La glucosa alta en sangre, común en casos de diabetes tipo 2 no tratada, puede traer consecuencia negativas para órganos vitales como el corazón, los riñones, los ojos, las arterias, los vasos y prácticamente cualquier tejido. Los niveles altos de azúcar en sangre provocan un daño gradual que puede extenderse hasta por décadas. Por otra parte, la hipoglucemia es aún más peligrosa ya que puede ser muy dañina en cuestión de minutos.
Los síntomas de la hipoglucemia incluyen:
 Dolor de cabeza
Sudoración
Temblores
Taquicardia
Confusión
Hormigueos o entumecimiento en la piel
Irritabilidad o agresividad


La hipoglucemia en muchas ocasiones no se experimenta como una afección grave o peligrosa, sin embargo, se trata de algo serio porque ocasiona estados mentales de irritabilidad, agresividad y confusión, lo que podría poner en riesgo nuestra vida al no poder reaccionar de forma adecuada ante una situación delicada. También es peligrosa porque podríamos llegar a experimentar desmayos, convulsiones y hasta entrar en coma.
Las fluctuaciones son normales Cuando pasamos muchas horas sin comer, la concentración de glucosa en sangre baja. Esta situación es normal. Nos da hambre, comemos y los niveles de glucosa vuelven a subir. Entonces la insulina entra en acción para transportar la glucosa dentro de las células y aprovecharla, entonces nuestra glucosa se mantiene dentro de ciertos niveles. Un metabolismo en buen estado es como un motor bien afinado. Nuestro cuerpo va a funcionar de forma adecuada, adaptándose a las cambiantes situaciones a las que nos enfrentemos. Por ejemplo, cuando pasamos muchas horas sin comer, el cuerpo manda una señal hormonal de estrés que le dice al hígado que libere glucosa en el torrente sanguíneo para mantenernos dentro de los límites normales. Cuando el metabolismo esta descarrilado o la máquina o motor funcionan a destiempo, entonces la glucosa no se mantiene dentro de los límites inferiores o superiores normales, comemos y sube demasiado, entonces entra en acción la insulina y la glucosa baja demasiado. El problema es básicamente uno: una alimentación deficiente. Un consumo alto de carbohidratos refinados y de azúcares va a ocasionar una subida de glucosa muy drástica y muy rápida. El consecuente pico de insulina y luego una bajada rápida y drástica de la glucosa en sangre. Ésta es la causa básica de la hipoglucemia.
¿Azúcar o glucosa? No nos confundamos con los términos azúcar y glucosa. El cuerpo humano requiere de ciertos niveles de glucosa sanguínea para funcionar. Esta glucosa la obtiene de los alimentos, en general se obtiene del procesamiento de carbohidratos y a veces de algunos ácidos grasos y en caso de ser necesario el propio cuerpo puede fabricar la glucosa a partir de la síntesis de proteínas por medio del hígado. Entonces tenemos que el cuerpo necesita glucosa en la sangre, para mantener en funcionamiento órganos vitales como el cerebro, corazón y otros órganos. En una dieta saludable y densamente nutritiva se obtiene del procesamiento de carbohidratos saludables como son todas las verduras, tubérculos y frutas. En una dieta deficiente se obtienen carbohidratos en exceso porque los consumimos fácilmente a través de panes, galletas, panqueques, pasteles, cereales, donas, cereales, refrescos, jugos artificiales, jugos naturales y hasta en la cátsup, aderezos, yogurts procesados y embutidos hechos con harinas. La gente piensa que debe consumir azúcar en la dieta porque necesitamos glucosa en la sangre, pero esto es una confusión terrible, ya que el cuerpo no tiene requerimientos de azúcar para poder funcionar. El cuerpo toma la glucosa de las frutas y las verduras, y aun cuando no comamos ni frutas ni verduras en un día, el cuerpo fabrica su propia glucosa. Así que no caigamos en el engaño y consumamos azúcar porque el cuerpo requiere de glucosa. Cómo detener este problema Existen dos formas. Cada que ocurra la hipoglucemia debemos comer un dulce que suba el azúcar rápidamente. Cambiar nuestra alimentación de forma radical, dejando de lado los azúcares y los carbohidratos refinados. En otras palabras, adoptar una dieta tipo Paleo. La opción número no es una cura al problema sino una salida rápida de la hipoglucemia. La cual va a seguir ocurriendo hasta que cambiemos nuestros hábitos alimenticios. El dulce es una salida urgente al problema y puede llegar a salvarle la vida a una persona, pero no es la cura. De hecho es contraproducente consumir azúcar, dulces o alimentos muy cargados de azúcar cuando sufrimos de hipoglucemia, porque lo único que hacemos es perpetuar el problema. Lo que estamos haciendo es de nuevo provocar un pico de subida en la glucosa, luego un pico de insulina para volver a sufrir un “bajón” de azúcar después de dos o tres horas. Es una situación contra-intuitiva porque las personas se sienten desesperadas cuando se viene la hipoglucemia y buscan algo dulce. Pero debemos de consumir algo densamente nutritivo y menos cargado de azúcar. La opción número dos es una cura definitiva al problema de la hipoglucemia, ya que al adoptar una alimentación densamente nutritiva como la dieta Paleo, estaremos consumiendo suficientes cantidades de nutrientes y estaremos evitando los causantes del problema que son los carbohidratos refinados en exceso, presentes en las harinas refinadas y todos los alimentos cargados de azúcares. Al seguir una dieta Paleo consumiremos suficiente proteína, grasa y carbohidratos complejos en cada comida, lo cual nos ayuda a mantener niveles estables de glucosa en sangre. Lo que a su vez se traduce en niveles de energía estables que impiden la aparición de la irritabilidad, ansiedad y confusión tan comunes cuando inicia la hipoglucemia. Esto sucede gracias a las características de la proteína, que es el macronutriente más complejo, y por lo tanto se tarda más en ser procesado, provocando subidas en nuestra glucosa sanguínea de forma gradual y moderada. Además el procesamiento de la grasa también ayuda a ralentizar el aumento en la glucosa sanguínea, y en el caso de los carbohidratos complejos se vuelve más gradual que en los carbohidratos simples debido a la cantidad de fibra y agua presente estos alimentos.
DIETA CONVENCIONAL VS DIETA PALEO Clarifiquemos esta situación con dos ejemplos contrastantes. PALEO CONVENCIONAL DESAYUNO Omelette de 3 huevos con pimientos y ajonjolí, acompañado de tocino y medio aguacate y una ensalada de lechuga sangría con nuez pecana, fresa y aceite de oliva. Jugo de naranja, un café con azúcar y una dona. O Jugo de naranja, cereal de caja con azúcar añadida y leche. O Jugo de naranja, sándwich de pan integral con mermelada y un vaso de leche. COMIDA Pechuga de pavo acompañada de verduras a la mantequilla.Medio aguacate.1 taza de fresas.1 vaso de agua mineral. Pizza con refresco grande. O Pasta acompañada de pan. O Hamburguesa con papas y refresco grande. CENA Calabacitas a la mantequilla acompañadas de albóndigas de carne. Un pan con leche. O Pizza y refresco. O Un tazón de cereal con azúcar añadida. EFECTO El cuerpo tiene niveles bajos de glucosa en sangre después de pasar las horas de sueño sin comer. El metabolismo de un desayuno así va a tomar tiempo, y los niveles de energía aumentan y se mantienen estables a los largo de la mañana.En la comida y en la cena los niveles de glucosa aumentan de forma gradual manteniendo un metabolismo saludable. El cuerpo tiene niveles bajos de glucosa en sangre después de pasar las horas de sueño sin comer. El metabolismo de un desayuno así toma poco tiempo debido a que el azúcar y los carbohidratos refinados no tienen que ser digeridos y pasan al torrente sanguíneo rápidamente. Los niveles de energía aumentan pero decaen a las dos horas y surgen ansiedad, antojos y hambre.Lo mismo pasa con la comida y con la cena. En algunos casos la ansiedad y la taquicardia pueden despertar a la persona debido a que puede llegar a caer la glucosa en sangre durante la madrugada a niveles muy bajos. GLUCOSA EN SANGRE Aumenta de forma lenta y gradual, sin alcanzar picos. Aumenta de forma súbita alcanzando picos que van a decaer en breve tiempo. GLUCOSA EN SANGRE CON LA DIETA PALEO
azucar BAJA GLUCOSA EN SANGRE CON UNA DIETA CONVENCIONAL
azucar alta El consumo excesivo de carbohidratos refinados provoca la hipoglucemia, pero no sólo están los desagradables síntomas asociados a ella. También genera un estrés excesivo al someter a nuestras glándulas adrenales a liberar demasiado cortisol para mantener la glucosa en niveles normales. Esto provoca síntomas de miedo, ansiedad, sudoración, mareos, taquicardias que son comunes en la hipoglucemia, pero a la larga este estrés puede generar problemas psicológicos como ansiedad, pánico y depresión. Otros problemas asociados a este tipo de dieta deficiente son infecciones de cándida, dislipidemia, hipetrigliceridemia, depresión del sistema inmune, cáncer, problemas del intestino, absorción deficiente de nutrientes, envejecimiento prematuro, desequilibrios hormonales, dolores de cabeza, migrañas, etc. MÁS PROBLEMAS El consumo excesivo de carbohidratos refinados y azúcares no sólo se asocia a la hipoglucemia sino que podemos relacionarlo con una gran cantidad de problemas de salud que son parte de la pandemia de síndrome metabólico que sufre la humanidad actual. El seguir una dieta con fluctuaciones bruscas de la glucosa sanguínea provocará primeramente una desregulación de la glucosa, la cual incluye a la hipoglucemia, pero este es sólo el primer paso para perturbar nuestro metabolismo. El segundo paso es la hiperinsulinemia o resistencia a la insulina, que sucede cuando el cuerpo genera grandes cantidades de insulina para bajar la glucosa sanguínea, pero con el problema de que ahora las células pierden sensibilidad a la insulina y no pueden aprovechar los nutrientes circulantes en sangre, por lo que la gente comienza a acumular grasa en la zona media del cuerpo. El tercer paso es que con tantas subidas y bajadas de glucosa sanguínea, se le pide al páncreas que trabaje en exceso, lo cual llega a agotar las células beta, que después de liberar tanta insulina, se vuelven deficiente en su producción y se llega a la diabetes tipo 2. Así que ahora ya sabes, no sólo se trata de hipoglucemia, si quieres prevenir, revertir o curar toda una serie de problemas de salud, sigue una dieta tipo Paleo y no olvides contarnos cómo te va…

1 comentario:

  1. Christian: Toda la razón, hasta hoy no se ha visto un estilo de vida con más éxito que la "dieta paleo", que si nos esforzamos por difundirla, cambiará el futuro de la salud, y la obesidad mundial.

    Saludos desde Chile

    ResponderEliminar